30 de mayo 2021

Con respecto al interés generado por el reporte de casos de infecciones fúngicas en pacientes COVID-19, referidas como infecciones por “hongos negros”, con relación a mucormicosis, y “hongos verdes”, como denominación de aspergilosis, entregamos a continuación precisiones sobre este tema.

Las sobreinfecciones por hongos se encuentran dentro de las complicaciones que pueden afectar a pacientes con cuadros graves. Las más frecuentes son las infecciones por levaduras como Candida spp. y por hongos filamentosos como Aspergillus spp. y agentes de mucormicosis, entre otros. Estas infecciones suelen afectar a pacientes con alteraciones de su inmunidad, pero también se describen en personas con cuadros graves que requieren manejo en unidades de cuidados intensivos, situación que se es muy conocida en el ámbito de la medicina crítica y la infectología, siendo las infecciones por Candida spp. las mas frecuentemente descritas en los pacientes graves. La sobreinfección por hongos filamentosos suele ser diagnosticada en personas con cáncer, trasplante y usuarios/as de medicamentos inmunosupresores, sin embargo en los últimos años se ha descrito también en personas aparentemente inmunocompetentes, como los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas y con cuadros infecciosos agudos como la influenza, caracterizándose por ser infecciones de difícil diagnóstico y tratamiento, con alta mortalidad asociada.

Desde 2020, en el contexto de la pandemia COVID-19, en todos los centros hospitalarios a nivel mundial se han descrito casos en que se ha identificado hongos filamentosos como Aspergillus spp., y de manera menos frecuente mucormicosis o combinaciones de ellos, como causa de sobreinfección respiratoria en pacientes graves en UCI en ventilación mecánica, cuyo diagnóstico y tratamiento es complejo.

En nuestro país se han detectado casos de infección por hongos desde inicios de la pandemia, cuya frecuencia se ha observado en aumento en la medida que se han presentado alza de casos graves en UCI. Su diagnóstico requiere alto grado de sospecha clínica, estudio microbiológico dirigido con cultivos y marcadores de infección fúngica, y su tratamiento se basa en fármacos antifúngicos por períodos de varias semanas. Si bien en los últimos días ha surgido especial interés por este tema, dado el gran número de casos de mucormicosis reportados por India, se debe señalar que esta situación se ha descrito de manera aislada en otros países, y su incidencia podría reflejar la concomitancia de factores de riesgo como la diabetes no controlada.

Nuestra sociedad, a través de la Red Chilena de Micología Médica, ha estado siguiendo estos casos y se encuentra atenta a la información que se genera en los distintos países con los datos epidemiológicos de casos de infecciones por este tipo de hongos, criterios diagnósticos y terapéuticos consensuados por expertos a nivel mundial.

Como Sociedad Chilena de Infectología consideramos que es un tema de alto interés que requiere dedicar la mayor atención de la comunidad médica a nivel nacional con el apoyo de recursos necesarios para vigilar la presencia de casos, junto a disponer del soporte requerido para facilitar el diagnóstico precoz y tratamiento oportuno a esta grave complicación.

Directorio Sociedad Chilena de Infectología

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